Las cremas son una bena manera para iniciarse en la cocina, son recetas tan sencillas que a veces nos sorprenden que estén tan ricas. Por supuesto, no tienen nada que ver con las que compras ya hechas en el súper, que a mí al menos, me sabe bastante a química.
Muchas veces pasa que no sabes que tomar para cenar, y esta suele ser una buena solución, sobre todo para los que cenamos ligerito. También es una buena manera de comer mas verduras en nuestra dieta diaria, y que a la mayoría le gusta.
Como no lleva patata ni nata, yo hago un poco de más y la congelo en porciones, aunque aguanta varios dias en la nevera sin congelar.
Ingredientes:
4 calabacines
1 cebolla
2 ajos
1 pastilla de caldo de pollo
2 quesitos
1 cucharadita de albahaca
pimienta
Elaboración:
Picar
el ajo y ponerlo en una cacerola con un poco de aceite. Cuando esté
ligeramente dorado, agregar la cebolla cortada en juliana. A los 10
minutos incorporar el calabacín pelado y cortado a rodajas finas.
Rehogar un poco el conjunto.
Agregar
agua, justo hasta apenas cubrir el calabacín. Echar la pastilla de
caldo de pollo, un poco de pimienta, un poco de sal y la albahaca.
Tapar y dejar cocer durante 30 minutos, con el fuego bajo.
Añadir los 2 quesitos y pasar por la batidora hasta que quede una crema fina. Rectificar de sal.